Tras la lente: Alexandre Valentino

Desde hace casi dos décadas, Alexandre Valentino es uno de los nombres que definen la escena del BMX en Europa. Es difícil encasillar a Alex en una sola categoría: es ciclista profesional, creador de marca, director del equipo Vans EMEA y uno de los cineastas y fotógrafos más influyentes del sector. Su instinto narrativo ha ido mucho más allá del BMX: ha retratado a estrellas de la Premier League, editoriales de revista y campañas de moda. Fuera del trabajo, Alex vive en el sur de Francia. Es un hombre de familia, humilde y discreto, incluso con todo lo que ha conseguido dentro y fuera del mundo del BMX. Como parte de nuestra serie «Tras la lente», llamamos a Alex para hablar con una de las personas más polifacéticas y exitosas del mundo del BMX.

Háblanos un poco de ti.

Me llamo Alexandre Valentino. Tengo 39 años y vivo en el sureste de Francia. Empecé como ciclista profesional de BMX y ahora soy cineasta, fotógrafo y director del equipo de BMX de Vans EMEA.

¿Cómo empezaste en esto?

Primero empecé con la bici y, poco después, llegó la cámara. Me encantaba ver vídeos de BMX y quería crear algo similar con mis amigos. Intentábamos hacer nuestras propias versiones de las revistas en vídeo que triunfaban por entonces, como Props Magazine, la biblia del BMX en los primeros años 2000.

Siempre me ha gustado grabar y estar detrás de la cámara. Cuando era más joven, mis padres compraron una videocámara y yo se la robé enseguida para grabar BMX. Nunca volvieron a verla. Ahí es realmente donde comenzó todo. Me pasaba horas viendo vídeos y grabando a mis amigos del barrio. Grabábamos todo el tiempo, pero no teníamos cómo editar porque no teníamos ordenador.

Aun así, grabar me cautivó por completo. Seguimos recopilando clips para un vídeo que finalmente salió tres años después. Creo que todavía está en Dailymotion en alguna parte…

¿Cómo avanzó todo a partir de ahí?

Gracias a mi temprana afición y pasión por el cine, tras el instituto decidí hacer la carrera de Arte y Cine. Sin embargo, con la perspectiva de ahora, no sé si fue la mejor decisión. En ocasiones, estudiar lo que te gusta puede terminar minando tu entusiasmo, especialmente siendo joven y vulnerable.

Después de tres años en la universidad, decidí centrarme en mi carrera en el BMX. En aquel momento, mi carrera profesional empezaba a despegar, con más patrocinadores, mayor interés y nuevos viajes, por lo que me pareció la elección adecuada. Dejar la carrera fue una decisión difícil, pero hablé con mis padres y me brindaron todo su apoyo.

A partir de ahí, me centré por completo en la bici y en viajar... El resto fue saliendo rodado. En 2009, creé mi propia marca y fue entonces cuando mi pasión por el cine volvió a renacer.

Practicar cualquiera de esos deportes de forma profesional aporta un gran componente artístico a tu vida, conectando con fotógrafos, cineastas y diseñadores gráficos de gran talento. Un saludo a Manu Sanz, Vince Perraud y Thibaut Grevet.

¿Te resultó difícil compaginar el rodaje y la bici en esa etapa?

Esa es la cuestión, en algún momento tienes que dar un paso atrás si quieres convertirte en un buen cineasta. Cuando fundé mi marca MarieJade, quería que el mundo reconociera el talento y el estilo de los ciclistas que me rodeaban. Me parecía tan impresionante lo que hacían que quise empezar a grabarlo.

No sentía realmente que estuviera dejando de lado mi carrera. Continuaba siendo el protagonista de los vídeos, trabajando en importantes proyectos junto a mi patrocinador principal, United BMX, además de Vans, Carhartt y otros. MarieJade se convirtió en otra forma de expresarme.

¿Qué te resulta más gratificante: montar en bici o grabar vídeos?

La verdad es que es una pregunta difícil. Es lo mismo y es diferente.
Cuando eres tú quien aparece en la película, te ves a través de los ojos de otra persona, y cada uno ve las cosas de manera diferente. A veces te ves a ti mismo y te parece maravilloso; otras veces, después de tanto esfuerzo, puede resultar decepcionante.

Como cineasta, estás transmitiendo al mundo tu propia visión de un momento, de personas, lugares y un tiempo específico. Y cuando sientes que lo has captado correctamente, el resultado puede ser increíblemente gratificante.

¿Qué te parece la combinación entre fotografía y vídeo?

iempre me he considerado más cineasta que fotógrafo.
Pero últimamente he estado haciendo más fotos que vídeos. Ha sido un pequeño cambio, pero al final, mi pasión sigue siendo contar historias, ya sea a través de imágenes o de películas.

¿Cuáles son tus herramientas o técnicas favoritas para fotografiar?

Vaya, tengo un montón de cámaras. Creo que realmente no importa cuál uses, todo depende de lo que quieras transmitir. Algunas cámaras simplemente ayudan a contar la historia un poco mejor.

La VX ofrece ese toque nostálgico del efecto 2000; para un acabado más nítido, la FX3 es la opción. Ahora mismo, disfruto mucho grabando con la Panasonic HMC150 para los proyectos de Vans. Una vez más, todo depende del estilo que quieras lograr, de ese ambiente particular que le da al vídeo su propio carácter BMX.

Tras haber fotografiado a Mbappé para la FIFA y trabajado en numerosas campañas publicitarias, ¿qué opinas sobre la combinación de lo comercial y lo auténtico? ¿Hay algún reto en cuanto a eso?

La verdad es que siempre me veré a mí mismo como un fotógrafo y cineasta de base, trabajando en proyectos más convencionales. Me siento como en casa en las calles, filmando BMX, aunque también me motiva el reto de llevar mi visión creativa a otros entornos.

Aparte de Vans, lo que más hago es crear contenido para mi novia. Su marca se llama Billynou, y también es una forma estupenda de expresarme creativamente. ¡Deberías echarle un vistazo!

¿Cuáles han sido algunos de sus viajes favoritos con Vans hasta la fecha?

Como cineasta, en su día hicimos una serie llamada The Palmistry Guide (La guía de la quiromancia). Se trataba de un proyecto con enfoque documental, que exploraba lugares en los que nadie había estado antes para montar en bici. Todo resultaba increíblemente exótico para grabar; todo era nuevo, bello y totalmente diferente a lo que estaba acostumbrado.

Viajamos a Marruecos, Islandia y Tailandia, alquilamos una furgoneta y nos dejamos guiar por gente de allí que nos enseñaron cosas que normalmente no se ven. Dormir en el desierto o en barcos, probar comida increíble en medio de la nada y recorrer lugares asombrosos.

¿Cómo es tu panorama local?

Antes era algo muy importante. Para ser un lugar cualquiera de Francia, teníamos una gran comunidad y un nivel muy alto de ciclistas. La energía era increíble, sinceramente, esa es la razón por la que creé mi marca.

Tengo que reconocer que las cosas ya no son iguales; todos estamos haciéndonos mayores. Esperemos que la próxima generación continúe con el legado.

¿Qué opinas de la escena del BMX en Europa?

No está exento de dificultades, pero los ciclistas más jóvenes están muy motivados. Hace poco estuve de viaje en París, pasando el rato con algunos de ellos, y su energía realmente me recordó lo que es la esencia del BMX.

Hoy en día, la presencia de mujeres ciclistas va en aumento, y la comunidad femenina sigue superando límites; es impresionante verlo.

¿Tus lugares favoritos para rodar?

Disfruto en cualquier lugar. Disfruto encontrando la belleza en cada cosa. Cada lugar tiene algo que ofrecer. Me fascina París por su arquitectura y su historia; toda la ciudad parece un escenario espectacular. Pero también me encantan los lugares rurales.

Durante la pandemia, hice un álbum de fotos sobre mi ciudad natal. Fue genial descubrir la belleza de un lugar que conoces de toda la vida. Cambió por completo mi perspectiva y, sinceramente, fue estupendo para la mente. El libro salió a la venta en 2022, con contribuciones de textos y poemas de gente de mi ciudad natal. Estoy muy orgulloso de ese proyecto, se llama Smile.

¿Hay algún fotógrafo o cineasta al que admires y que haya inspirado tu trabajo?

Trabajar con Thibaut Grevet en su día fue una de las mejores cosas que me han pasado en el ámbito creativo. En 2012, trabajamos juntos en una serie de vídeos llamada Another Perspective. Fue un proyecto increíble, pero lo que más recuerdo es un juego que inventamos: sacar la mejor foto «aleatoria» con el móvil y luego compararlas.

Fue divertido, pero también nos abrió los ojos a detalles que probablemente no hubiéramos notado de otra manera.

Los referentes artísticos que más me han influido fuera del BMX son Michel Gondry, Sofia Coppola, Henri Cartier-Bresson, Pierre Boncompain, Monet y Picasso.
Dentro del mundo de los deportes de acción, siempre he admirado a Manu Sanz y Vince Perraud, y hoy en día, Arnaud Wolff y Ben Gea están haciendo un trabajo excepcional.

Aparte de la fotografía, el cine y el BMX, ¿qué otros intereses tienes?

Aparte del BMX, me encanta crear. Me gusta pintar, sobre todo retratos o desnudos de mi novia, y la verdad es que me ha ayudado mucho a comprender la ciencia del color.

También acabo de terminar un libro infantil que he escrito e ilustrado yo mismo, cada ilustración es básicamente un pequeño cuadro.

Recientemente volví de un viaje en bicicleta, que se ha convertido en una de mis actividades favoritas para disfrutar en el tiempo libre. Combina dos de mis mayores pasiones: montar en bici y estar en la naturaleza. Tenemos un pequeño grupo de ciclistas en Instagram llamado Summer Mixtape Fanclub, ¡síguenos!

Con todo lo anterior, ¿todavía tienes tiempo para montar en BMX?

Siempre.
 

Además, siendo director del equipo europeo de BMX de Vans, imagino que tienes una visión muy completa de todo lo que implica montar un viaje, gracias a tu pasado como ciclista profesional y a tu experiencia como cineasta y fotógrafo, ¿no?

Creo que por eso me contrató Vans. Como director de equipo con una carrera profesional a mis espaldas y además dedicado a la filmación, es lógico que los ciclistas me tengan cierto respeto. Cuando intentan un truco difícil, saben que lo entiendes, saben que lo capturarás de la manera correcta.

Pero, sobre todo, hay un sentimiento de empatía. Todos nos entendemos y comprendemos de dónde viene cada uno.

¿Algo que añadir? ¿Un mensaje para internet? ¿Un mensaje a tu antiguo yo?

Hace poco tuve esta conversación con una de mis ciclistas, que tenía un poco de miedo a sufrir una caída grave, sobre todo después de que otro ciclista tuviera un accidente grave. Montar en bici puede ser peligroso, y ella tuvo ese momento de revelación: ¿realmente vale la pena?

Me hizo pensar mucho. Le dije que a veces es mejor simplemente disfrutar. No es necesario arriesgar la vida practicando deportes de riesgo para divertirse. Algunos de los mejores ciclistas son los que tienen más estilo, y yo, personalmente, valoro mucho el estilo y la manera de montar.

Procura que tu estilo al montar en bici sea lo más elegante posible.